Según se tuvo conocimiento, cerca del mediodía de este jueves, el proveedor de espuma que había dejado en consignación la mercadería para los corsos de General Campos, luego de insistir sin tener éxito con el cobro de las mismas, se dirigió en primer lugar a las oficinas de la Secretaría de Cultura de la localidad, buscando al responsable que (entre cuentos y cambios de números telefónicos), se escabullía cada vez que el comerciante quería cobrar la cuantiosa suma de la mercadería dejada en consignación.
Ante la insistencia del vendedor de espuma, las dos señoras que se encuentran en la oficina de cultura, terminaron por explicarle al comerciante que el "responsable" se encuentra en otra oficina, ya que cumple el rol de Secretario de Desarrollo Social.
Indignado, el vendedor de espuma, les replicaba que este chico le decía que había cambiado de número de teléfono, que había que esperar a compras para que emita el pago y otras tantas cosas, de las cuales sospechaba porque la espuma se vende en el carnaval y automáticamente se reserva el dinero para el pago de la concesión. "Siempre vengo a pasear con mi familia y nunca tuve problemas en esta localidad, pero esta vez tuve que llamar a un amigo a que me acompañe para poder cerciorarme de que cobremos esta cuenta, ya que les dejé como todos los años en total confianza la mercadería y NO PUEDO COBRARLA".
El comerciante se dirigió luego hacia la oficina de Ayuda Social, donde le dijeron que tenía que esperar porque "El Chavo" no se encontraba.
Luego de Insistir, logró que el superfuncionario lo atienda y luego de la insistencia y los gritos que se escuchaban a una cuadra, logró cobrar parte de lo adeudado.
"Estaba decidido a cualquier cosa" dijo el vendedor de espuma, "dejé la mercadería en total confianza como vengo haciendo hace varios años y siempre me esquivaba. Ya me había dado cuenta que no quería pagarme y es una importante suma de dinero que yo arriesgue y que este chico no me iba a pagar"