jueves, 23 de agosto de 2012

Comienza un juicio por nacimientos en cautiverio, secuestros y desapariciones


El ex dictador Reynaldo Bignone, el represor Santiago Riveros y otros siete imputados serán juzgados desde hoy por secuestros y violaciones a los derechos humanos, entre ellos a siete embarazadas que dieron a luz en una maternidad clandestina.
Se trata de la maternidad clandestina que funcionaba en la guarnición militar de Campo de Mayo en la última dictadura.




El Tribunal Oral Federal 1 de San Martín, integrado por Héctor Sagretti, Daniel Cisneros y Daniel Petrone, estará a cargo del juicio en el que se acumularon cinco causas, entre ellas la apropiación de Laura Catalina de Sanctis Ovando, nieta restituída en 2008.
Las audiencias se realizarán desde hoy a las 9.30 en el nuevo edificio destinado a los juicios de lesa humanidad en jurisdicción de Campo de Mayo, ubicado en Pueyrredón 3728, partido bonaerense de San Martín.
Los acusados, además de Riveros (ex comandante de Institutos Militares) y Bignone (segundo de Riveros), son Luis Sadí Pepa, Eugenio Guarañabens Perelló, Julio San Román, Hugo Castagno Monge, Carlos Eduardo Somoza, Carlos del Señor Garzón y María Francisca Morillo, estos últimos acusados por apropiación de Ovando.
Tres de las causas corresponden a siete embarazadas desaparecidas junto a sus parejas y en un caso una asesinada en Campo de Mayo.
Los nombres de las embarazadas desaparecidas junto a sus parejas son Marta Graciela Alvarez, Ana María Lanzilotto, María Eva Duarte, Isabel Acuña, Miryam Ovando, Susana Stritzler y Beatriz Recchia.
Alba Lanzilotto, del grupo Memoria del Pueblo de la parroquia de la Santa Cruz, dará su testimonio en el juicio por la desaparición de su hermana Ana María, quien desapareciera embarazada de ocho meses el 19 de julio de 1976.
En diálogo con Télam, Lanzilotto valoró que "se los condene a todos por el daño que han hecho al país", aunque está segura de que el pacto de silencio entre los represores se mantendrá y no sabrá sobre el destino de su sobrina y el bebé recién nacido.
"No hablarán porque el pacto es una enfermedad terminal, pero tengo la esperanza de que este juicio sirva para que mi sobrino o sobrina y los casi 400 que faltan reflexionen y sientan la necesidad de saber la verdad y de salir de ese mundo de mentiras", afirmó.
Previo a su primer testimonio en un juicio después de 36 años del secuestro de su hermana, Lanzilotto reconoció que "las familias ansiamos recuperar parte del ser amado en una sonrisa, gesto o en un abrazo, y recobrar de alguna manera lo que hemos perdido".
Los querellantes en el juicio son la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo, Laura de Sancrtis Ovando, la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y la Asociación de ex Detenidos Desaparecidos, entre otras querellas particulares.

No hay comentarios:

Publicar un comentario